Miguel Ángel Máñez, economista, gestor, persona 2.0 por excelencia, autor del libro Conversaciones sobre gestión sanitaria, con un blog de culto Salud con Cosas que escribe hoy en nuestro blog por nuestro #10añosdespués. Miguel Ángel es buen amigo de la Escuela Andaluza de Salud Pública, con la cual colabora como docente y en proyectos de consultoría internacional, y también de la Escuela de Pacientes, con la cual siempre ha estado y sigue estando cerca, colaborando con élla en diferentes actividades. Muchas gracias Miguel Ángel por tada tu gran actividad, por tu gran saber hacer y por este interesantísimo artículo. Una gran reflexión. MUCHÍSIMAS GRACIAS
Los
blogs han cambiado. Ya no se ven como una herramienta innovadora, y de
hecho se leen cada vez menos. No permiten difundir vídeos como Instagram
o YouTube (salvo que incluyas un enlace) y tampoco generan
conversaciones eternas. Pero los blogs tiene un componente que los hace
especial: el poder de la palabra escrita.
Además los blogs
siguen siendo el cuartel general del conocimiento, el campo base para
guardar nuestras reflexiones e ideas. No tiene el mejor sistema del
mundo para organizar la información, pero sigue siendo un sitio que no
falla, dónde puedes explayarte, dónde es fácil buscar aquello que
contamos tres años antes y que siempre está ahí. Nos sobran los motivos,
como cantaba Sabina. Y siempre tiene cabida para experiencias,
historias, recuerdos, sueños o sencillamente para contar el día a día. Y
qué más da si alguien lo lee cuando lo más importante es el acto de
escribir.
En mi caso, Salud con Cosas nació con la intención de compartir y aprender. Y 11 años después (solo un año más que la Escuela de pacientes), ambos objetivos están cumplidos de sobra. Mantener un blog implica leer, estar al día, estudiar, escuchar, tomar notas y escribir: un ciclo completo que resume perfectamente el concepto de aprendizaje. En resumen, un blog es una experiencia de aprendizaje y reflexión muy potente, sencilla y gratis. Poco más se puede pedir...
Además,
escribir un blog e interactuar en redes sociales me ha servido para
formar parte de una red, algo caótica tal vez, de personas con intereses
muy parecidos a los míos, que me ayudan a saber algo más y me muestran,
sin tapujos, que a veces mi forma de pensar no es la correcta. ¿Qué
quiere decir esto? Que las redes sociales ayudan a pensar, y te muestran
las alternativas al pensamiento único de muchos gurús. Conectar con
personas que piensan de forma opuesta a la tuya es una de las ventajas
de las redes, quizás algo dura al principio, pero imprescindible para
aprender y avanzar.
La Escuela de Pacientes nació con esa vocación: utilizar las redes sociales como herramienta de divulgación y difusión, y también para el aprendizaje y la reflexión. Y día a día nos han demostrado que se puede romper la brecha digital con formación, con acompañamiento y con pacientes que ayudan a pacientes. Una ecuación sencilla que no falla.
Miguel Ángel Mañez
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